Los sherpas anudan las últimas cuerdas antes de arrancar la temporada. Durante mayo, el mejor mes para ascender al Everest, habrá escaladas masivas: 372 personas con permiso intentarán lograr cumbre, mientras que aproximadamente 400 guías, sherpas, porteadores y asistentes los apoyaran en su objetivo. Son 42 las expediciones registradas para aprovechar la corta ventana de relativo buen clima que otorga este mes.
El año pasado, el Departamento de Turismo de Nepal expidió 289 permisos y, a pesar de haber recibido quejas por parte de algunos alpinistas que encontraron espacios repletos de gente, este año aumentará la participación de los turistas que no quieren quedarse sin llegar a la cumbre del mundo.
Esta gran afluencia se debe en parte a los ascensos pendientes: después de que en 2014 y 2015 acontecieron avalanchas mortales en la montaña, varios equipos se quedaron sin posibilidad de cumbre, pero recibieron una revalidación para este año.
Esta semana es la semana de las escaladas masivas al Everest. Cada vez que veo esta foto me acuerdo de Into thin air, el librazo de Krakauer pic.twitter.com/asz9na1zhW
— Andres Burgo (@Andres_Burgo) May 8, 2017
La temporada 2017 comenzó con un clima poco propicio que retiene las expediciones en los campamentos base. Los fuertes vientos parecen amainar a medida que se ajustan los arneses, en un temporada cuyo costo fue de entre 30,000 y 45,000 dólares por ascenso, y que representa una gran fuente de ingresos tanto para compañías de guías, como para las comunidades locales.
El Everest estaría recibiendo en estos días a Ueli Steck, cuya muerte en el Nuptse el pasado 30 de abril tiene de luto a la comunidad alpina. Centenares de escaladores tendrán la posibilidad de recordar a la “Máquina Suiza” desde los helados picos del cielo. Por otra parte, Kilian Jornet, otro de los atletas de alto impacto que están presentes en la temporada, concluyó su aclimatación en el Cho Oyu y se dirige al Everest para concluir su proyecto Summits of My Life.
Así pues, la temporada 2017 del Everest se anticipaba llena de récords que, de una u otra manera están ocurriendo, y no necesariamente en lo deportivo. Con 372 personas intentando la cumbre de manera comercial, y un puñado de manera deportiva, el Everest es una paradoja del alpinismo que por igual atrae turistas en serie, y aún hace soñar a algunos de los mayores exponentes del deporte. 2017 ya es un año para recordar en el Everest.