Javier Serratos ha sido reconocido por más de una década como uno de los mejores escaladores de su generación. Colaborador incansable en Alta Vertical, entrenador profesional, escalador de 5.14's, dueño de muro, esposo y filósofo (entre muchas otras curiosidades), Javier tiene una perspectiva muy particular de la escalada y la vida, una que lo hace llevar más lejos sus límites y que ahora nos comparte.
Gracias a Javier por su tiempo para esta entrevista. Sabemos que entre el trabajo de día, la construcción del nuevo Toka y seguir teniendo vida personal no es fácil hacer un espacio.
Entrevista íntegra.
Freeman: ¿Qué es un hombre (o mujer) libre? ¿Qué es un “Freeman”?
Javier: Es aquella persona que aún esclavizada a sus propias pasiones, siente una libertad profunda cuando las realiza.
No creo que exista una libertad total como tal, de una u otra manera cada uno de nosotros estamos “atados” en cierta medida a diferentes cosas (y tristemente no siempre es de una cuerda al arnés), la escuela o el trabajo por ejemplo, pero creo que lo realmente importante es encontrar un balance positivo entre lo que hacemos. Aunque suena parecido, no es lo mismo decir “yo hago lo que quiero” que “yo quiero lo que hago”, lo primero puede ser un largo camino sin rumbo fijo, lo segundo al menos indica que estás en el camino correcto y el resto sólo se trata de disfrutar al máximo el recorrido.
Un Freeman es quien sabe que a veces sólo se trata de desplegar las alas y dejarse llevar libre por el viento, pero también sabe que a veces hay que nadar contra corriente y sea cual sea el caso, puede seguir disfrutando del paseo.
Es quien sueña, quien visualiza, quien actúa, quien muestra, quien dirige, quien se compromete, quien aprende, quien enseña, quien nunca se rinde, quien se cae y vuelve a intentar, quien añora, quien desea, quien se entrega, quien no abandona, quien hace más de lo que dice o quien lo que hace habla por sí mismo, quien trabaja duro y juega duro.
Y podría seguir y seguir…
F: ¿Cuál es la palabra que mejor describe tu código de vida como persona y deportista?
J: Disciplina.
Mi teoría de la triple D, Deseo, Disciplina y Determinación.
Todo eso, sin dejar de soñar, de divertirse.
F: Cuéntanos dos barreras a las que te has enfrentado para vivir tus sueños deportivos y como persona.
J: Unas son las barreras que nos dijeron que existen.
Las otras son las que nosotros mismos nos inventamos.
Es cierto que existen cierto tipo de barreras, pero el problema no son las barreras mismas sino el cómo las afrontamos. A veces podemos escalar grandes paredes y otras veces nos parece imposible brincar un ladrillo. Hay barreras que se deben escalar y hay barreras que es más sencillo rodear. Hace un par de décadas parecía imposible escalar un 13´s, ahora lo que parece imposible son los 16´s… ¿Serán imposibles?
Una barrera puede ser el que a pesar de querer lo que haces, no siempre se puede hacer lo que quieres.
Hay barreras y pretextos, las primeras se pueden superar en la mayoría de los casos; los pretextos muchas veces son insuperables, ya que es uno mismo quien los decreta.
F: ¿Qué consejo te hubiera gustado recibir cuando empezaste a escalar?
J: Que estudiara porque de la escalada no se puede vivir (risas).
En realidad todo, cualquier consejo, venga de quien venga vale la pena ser escuchado. Todos aprendemos de todos. Pero aunque me hubiera encantado recibir miles de tips y consejos, he de reconocer que me ha gustado el proceso de ir descubriendo por mí mismo. Intentar descifrar una y otra vez el mismo problema. El nunca tener una respuesta 100% correcta te motiva a seguir buscando una mejor.
F: ¿Recuerdas alguna experiencia en particular que haya hecho la diferencia en tu crecimiento deportivo?
J: Más que una experiencia, ha sido la disciplina de la que antes hablaba. Creo que hay en principio dos tipos de personas, las que nacen con un talento súper desarrollado (lo descubren y lo explotan); y las que tenemos que trabajar horas extra para conseguir nuestros propios objetivos. El trabajo del día a día y la motivación por hacerlo son los factores que determinan nuestro crecimiento. Conocer a gente con más experiencia y estar dispuesto a aprender (y compartir). El poder trabajar en algo relacionado a mi pasión.
Javier actualmente trabaja en la inauguración de la segunda versión de Toka la Escalada, la sala de boulder que inició con su esposa Quetzali Galindo (escaladora de alto nivel por mérito propio). Tiene cientos de trucos de escalada bajo el sombrero, puedes contactarlo en Toka la Escalada.
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