¿Sabes qué tan amigable es tu equipo de montaña con la naturaleza que visitas? Algunos productos outdoor podrían ser más perjudiciales de lo que crees.
Una vez más llega el tan esperado fin de semana, estás listo para trabajar en ese proyecto que no te deja dormir en paz. Preparas tu mochila con el equipo necesario y te pones tu chamarra y tus botitas con protección Gore-Tex para estar bien listo para cualquier situación climática que pueda presentarse.
Hasta hace poco, ésto parecía una práctica muy normal, común y corriente, y bastante responsable. Pues siempre confiamos en los profesionales de la confección de ropa, material y equipo de montaña, pues bien sabemos que siempre están investigando nuevas formas para aplicar la mejor tecnología en sus productos. Ahí la razón, de que varios enloqueciéramos con el lanzamiento de tecnologías como el Gore-Tex. Un tratamiento profesional que prometía mantenernos secos bajo las condiciones más extremas. Debo aceptar que yo por lo menos, corrí entusiasmada a comprar mis botas y mi chamarra cuando salió al mercado.
Pero, recientes publicaciones han despertado polémica sobre estos maravillosos productos. Pues la ropa y parte del equipo que usamos para llevar a cabo nuestras actividades al aire libre tiene un gran impacto en el medio ambiente y en nuestra salud.
Me pareció bastante irónico que personas que llevamos a cabo actividades en la naturaleza usemos productos que la dañan tanto. Así, que me dí a la tarea de investigar un poco, con la idea de contar con la mayor información necesaria para que podamos hacer decisiones cada vez más responsables. Revisé varias fuentes en línea entre ellas, un artículo de Enrique Zaragoza que comenta varias cosas que he reproducido en éste artículo.
Descubrí, que varias de las empresas más grandes y reconocidas de ropa para deportes en exteriores utilizan un químico llamado Perfluorocarbonos (PFCs). Los PFCs forman parte de un grupo de compuestos químicos que por sus enlaces de carbono y flúor, tienen unas propiedades físicas que los hace impermeables y antiadherentes. Estos enlaces son muy estables lo que evita que sean biodegradables, y los convierte en potentes y peligrosos contaminantes.
Un detallado informe publicado por Greenpeace, “denuncia el uso generalizado de sustancias químicas altamente peligrosas y de lenta degradación en el proceso de elaboración de productos outdoor”. Empresas líderes de la industria como The North Face, Columbia, Patagonia, Salewa y Mammut entre otras, utilizan estos químicos llamados PFCs, dejando un impacto nocivo sobre todo en muestras de agua.
Estos químicos se usan en la fabricación de la ropa especializada de montaña para producir la membrana interna, ya que es resistente al agua gracias a su estructura microporosa. La más famosa es nuestro amado Gore-Tex, fabricado con un fluoropolímero (PTFE), mejor conocido como teflón.
También son utilizadas en el tratamiento repelente en la superficie del tejido, lo que hace que estos productos no sólo sean resistentes al agua, sino también a las manchas de aceite y grasa. Este efecto se logra en los productos gracias al tratamiento exterior realizado con PFC’s que hace que las gotas se “resbalen” y no sean absorbidas por la tela. Estos químicos no sólo se utilizan en ropa, sino también en otro tipo de productos como calzado, casas de campaña, mochilas, cuerdas e incluso sacos de dormir.
El problema es, que durante la producción de estos fantásticos productos que nos son tan útiles, las fábricas liberan, principalmente en el agua, estos compuestos que resultan ser bastante tóxicos. Una vez que han sido liberados en el medio ambiente, los PFCs tienen una lenta degradación, permanecen mucho años en el ambiente y se dispersan por todo el planeta.
El estudio se realizó tomando muestras en zonas remotas de China, Italia, tres países nórdicos, Rusia, Eslovaquia, Suiza, Turquía y también en Chile, específicamente en el Parque Nacional Torres del Paine, declarado en 2013 como la Octava Maravilla del Mundo.
“Hemos encontrado rastros de peripolifluorocarbonos (PFCs) nocivos y peligrosos para el medio ambiente en muestras de nieve de Torres del Paine y en todos los lugares que han sido visitados por los equipos de Greenpeace”, señaló Estefanía González, vocera de Greenpeace en Chile, quien también dijo que “es muy preocupante ver que estos químicos tan nocivos y de tan lenta degradación hayan alcanzado los más inmaculados y remotos lugares del mundo.”
Los PFC’s también son bioacumulables, lo que significa que los químicos se acumulan en nuestro cuerpo. Se han llevado a cabo varios estudios tomando muestras de sangre en usuarios de los productos tratados con PFC´s, y los resultados han demostrado que gente en todo el mundo cuenta con acumulación de éstos químicos en la sangre. Ésta acumulación causa problemas en el sistema reproductivo, aumenta la probabilidad de tumores y afecta el sistema inmunológico y hormonal.
Desde 2008, los PFOS (un tipo de PFCs) se encuentran prohibidos en Europa, aunque con algunas excepciones como en el sector textil. En Estados Unidos no están prohibidas, pero sí está regulada la concentración máxima de estos químicos en el agua potable. La “Enviromental Protection Agency” (EPA por sus siglas en inglés) señala en su informe de Mayo de 2012 que se necesitan más estudios que confirmen los posibles efectos secundarios en seres humanos pues hasta ahora la mayoría de los estudios se han realizado en animales. Lo que sí deja sin duda éste estudio, es que estos químicos se acumulan en nuestro cuerpo donde pueden estar hasta 4 años. (Documento completo de la EPA sobre este tema en inglés, Marzo 2014)
Pero, ¿qué podemos hacer nosotros como consumidores? La verdad es que bastante. Lo primero es informarnos y saber qué es lo que sucede con los productos que utilizamos para así poder tomar decisiones informadas e inteligentes.
Lo segundo es ser bastante honestos con nosotros mismos y pensar si en verdad necesitamos una prenda tan técnica cuando probablemente la actividad que desarrollamos no la requiere, o si nada más la queremos porque está bien padre. Si decidiste que de verdad la necesitas porque vas a hacer una expedición súper extrema, lo que puedes hacer, es tener una prenda y tenerla contigo lo más posible. Aunque lo mejor sin duda, sería adquirir un producto libre de PFC´s.
De acuerdo al informe, ya hay varias compañías como Puma y Adidas, que están tomando cartas en el asunto, en cuanto a la eliminación de los PFCs. Otras empresas más pequeñas como Fjällräven, Paramo, Pyua, Rotauf, Nikwax, Purtex o Schöeller y R’ADYS tienen colecciones enteras de ropa técnica a prueba de agua que no tienen PFCs.
También existe la membrana de poliéster llamada Sympatex, que es una buena alternativa para sustituir al Gore-Tex. Jack Wolfskin ha desarrollado su propia membrana libre de PFCs llamada Texapore (aunque aún usan PFCs para el tratamiento exterior).
Por último, podemos levantar la voz y exigir a estas grandes marcas que fabriquen productos que no nos hagan daño ni a nosotros, ni a nuestro entorno. Dentro de las comunicaciones que ha hecho Greenpeace, ha invitado a los amantes de las actividades al aire libre a que se movilicen y exijan a la industria del outdoor que deje de usar estos químicos tan nocivos. Greenpeace.cl/nocontaminen La realidad es que ningún proceso está libre de impacto ambiental, pero informarnos siempre nos dará la oportunidad de ser más responsables en el nuestro.
Más información:
http://deportesostenible.com/2013/08/31/ropa-de-montana-una-cuestion-de-quimica/