“DA” sufrió, junto a otros 13 escaladores, un asalto con “armas largas” el pasado 14 de enero en la zona de escalada Las Manzanas, y relata aquí los hechos.
Platicamos con una de las víctimas del hecho ocurrido, quien nos solicita ser mencionado como “DA” en esta nota. El relato siguiente se reproduce con autorización del autor, protegiendo datos personales.
“Quiero difundir este texto porque siento la responsabilidad de hacerlo. Quiero dar a conocer la situación que vivimos con el objetivo de generar conciencia y que la comunidad tome sus precauciones para ir a dicha zona.
Una persona fue golpeada, fuimos obligados a quitarnos la ropa, y hubo fuertes agresiones hacia las mujeres.
A mi, en lo personal, Las Manzanas me parece un escenario ideal para hacer deportes outdoor, pero con lo que vivimos el 14 de enero del 2018, difícilmente volveré hasta que las cosas no cambien y se garantice seguridad en la zona.- “DA”
Relato por “DA”
El siguiente escrito tiene por objetivo que ningún ser humano, mujer u hombre, niña o niño sufra los daños y percances que otras personas logran con sus decisiones y conductas.
Hace mucho tiempo, cuando recién empezaba a escalar, no sólo me agradaba la sensación de la adrenalina en el cuerpo y en la mente, la sensación de éxito y fracaso, también me agradaba la sensación de poder entender a la naturaleza, admirarla por sus simplicidades y por supuesto, respetarla. Las vivencias, son una de las herramientas principales para poder transmitir de manera certera la razón de una pasión, como lo son correr, andar en bici, acampar, pero sobre todo, escalar.
En lo personal, Las Manzanas, en Jilotzingo Estado de México es, o mejor dicho, era uno de mis lugares preferidos para realizar actividades outdoor por su cercanía a la Ciudad de México; y precisamente por esto mismo, deseo transmitir mi experiencia con respecto a los hechos ocurridos el día Domingo 14 de Enero del 2018 alrededor de las 12.30 HRS en la zona de escalada base:
Lo que ocurrió fue una acción que ejecutó un grupo de tres hombres, mal dirigidos por un cuarto, quien parecía conocer cien por ciento la zona. Todos vestían ropa que asemejaba a la de un comando tipo policial, iban armados con armas largas de tipo rifle y escopeta, encapuchados con pasamontañas y gorras de apariencia oficial, en resumen, un grupo conformado de quienes parecían ser jóvenes sin experiencia delictiva, puesto que pudimos darnos cuenta que no sabían a ciencia cierta qué era lo que deseaban, sin duda alguna aquello parecía más bien improvisado que planeado.
Sus movimientos fueron los siguientes: se percataron de que nos encontrábamos en la zona de escalada. Uno de ellos decidió inspeccionar la zona y para hacerlo salió de uno de los accesos hacia la zona para hacer notar su presencia. Después, otro integrante de este grupo subió portando consigo dos armas y un tercero apareció entre los matorrales. El cuarto apareció, pero nunca fue visto, ya que solo dirigía al resto desde muy atrás.
Está demás que relate los hechos a detalle. Pero fuimos víctimas del despojo de nuestro dinero y nuestros teléfonos celulares. A nadie se le quitó equipo de escalada, ni cuerdas, ni mochilas, ni siquiera contenedores de agua. Ni un sólo mosquetón.
Sin duda lo más difícil que vivimos, fue intentar mediar las circunstancias a expensas de ser lastimados, pero cuando hay mujeres involucradas que pueden ser maltratadas, tu arrebato, tu enojo o tu instinto te hace actuar a la defensiva. Desgraciadamente no pudimos controlar en ningún momento la situación, pero sí logramos calmar un tanto las cosas; pero sí, la respuesta es sí, hubo daño. La dignidad y el pudor es uno de los valores que uno debe tener arraigado para entender este concepto, en un núcleo de equidad y paz. Así fue, sufrimos la osadía de hombres capaces de intentar golpear, maltratar o maldecir a hombres o mujeres indefensos y pacíficos.
¿Cómo te sentirías si te encuentras realizando una de las actividades que amas en tu vida y de repente alguien viene y la interrumpe con el único fin de robar lo que por derecho te pertenece, y además te amenaza y agrede verbalmente a ti y a las mujeres que te acompañan?
La respuesta sólo la tendrás en tu mente, cual sea tu carácter como persona siendo hombre o mujer, jamás en la vida desearías enfrentarte al algo similar o igual.
A conciencia digo lo siguiente; en ningún momento pretendo hacerme el fuerte o el cabeza dura, para nada, en lo absoluto. Pero hay momentos en la vida en los que las circunstancias determinan y marcan el tipo de ser humano que eres y para lo que estás hecho.
Haber enfrentado esta situación de la mejor forma posible, haber intentado ayudar, soportando la presión e intentando calmar un poco los malos tratos, me ponen a pensar, que no puedes dejar pasar un minuto de tu vida sin cumplir tus metas y objetivos personales, pero sobre todo, que en todo momento debes intentar ser mejor persona.
Con lo dicho, te pido por favor que no asistas a este sitio hasta que las cosas no cambien, porque todos los rumores de asalto y extorsión son aquí una realidad. Antes de pensar en acudir a esta zona a realizar cualquier actividad al aire libre piensa que pueden ser tú, tu familia, o tus amigos, los siguientes en vivir esta terrible experiencia.
Estamos bien y con ganas de seguir con nuestras vidas. ¡Que viva el outdoor en México, pero, sobre todo, que viva la escalada!
Si leíste esta breve redacción, ayuda a que alguien más pueda enterarse y decida no acudir a este sitio, hasta que las condiciones de seguridad sean lo suficientemente convincentes en proteger a las personas ante cualquier hecho de robos o accidentes.
Atte. DA