Los Piolets d’Or, los premios que reconocen a los mejores montañistas del mundo, hace unos días entregaron un emotivo reconocimiento a Jeff Lowe.
La esperada premiación que reconoce lo mejor del año en el alpinismo entregó su premio honorífico al mítico alpinista Jeff Lowe, reconociendo su carrera entera. Por otra parte, dos proyectos se llevaron el Piolet d’Or 2017: la escalada a una de las montañas Nyenchen Tanglha en el Tibet, que lograron Nick Bullock y Paul Ramsden, y los 6,904 metros del Thalay Sagar en la India, por parte de Dmitry Grigoriev, Dmitry Golovchenko y Sergey Nilov.
Con más de 1000 ascensos pioneros, entre ellos la ruta directa al Monte Eiger llamada Metanoia, Jeff Lowe es el noveno alpinista en recibir el reconocimiento por toda su trayectoria. Recordamos a Lowe por su práctica del alpinismo en el estilo más puro, que consiste en la capacidad de ser autosuficiente en sus ascensos, sin apoyo externo, cargando lo menos y a la mayor velocidad posible.
Así mismo, el pasado miércoles, durante las actividades de los Piolets d’Or, se proyectó el documental Metanoia, dirigido por Jim Aikman, que da cuenta de los episodios más impactantes en la vida de Lowe, incluyendo, por supuesto, el mítico ascenso a la ruta homónima en el Eiger que apenas consiguió una repetición el año pasado. Por supuesto, Metanoia formará parte próximamente de la cartelera de Freeman en Cinépolis.
Por otra parte, los Piolets d’Or 2017 celebraron un debate sobre la necesidad de presentar pruebas en ascensos de alto nivel. Esta reunión, que contó con la participación de periodistas, alpinistas e historiadores, fue de carácter urgente ante la creciente población de montañistas profesionales y las controversias en torno a algunos ascensos, como es el caso de Cesare Maestri, Tomo Cesen, Herzog-Lachenal y Ueli Steck. El mensaje es que no basta con contarlo, hay que tener pruebas fidedignas de las hazañas que se logran.