Sebas Azcárate, el cancunense de 25 años de edad que superó dos veces el cáncer y descubrió en las montañas, el lugar idóneo para vivir.
Sebastián Azcárate es de esas personas que a su corta edad ya inspira y no sólo por su trayectoria dentro del trail running, sino también por haber superado el cáncer en dos ocasiones pero, sobre todo, porque brilla por su humildad y alegría por vivir.
Hablar con él es como encontrarse a uno de esos jóvenes personajes que han superado batallas épicas como si nada. Deportista desde temprana edad, a los doce años cruzó los 10km de mar abierto que unen la costa de Cancún con Isla Mujeres. Encontró, afirma él, los valores más importantes en el fútbol americano, que practicó durante nueve años. Pero una ruptura de ligamentos del tobillo derecho terminó con el sueño de una beca universitaria.
En el proceso de recuperación, conoció la Fisioterapia, estudios que emprendió. Correr en la playa, hacer triatlón o cualquier actividad física ha sido parte fundamental de su vida. Pero esto cobró aún mayor relevancia cuando a los 19 años le detectaron cáncer testicular.
“Un día cualquiera, después de trabajar, salí de bañarme y de pronto, sentí algo raro en mi cuerpo. No le di importancia hasta que unas semanas después vino un dolor muy fuerte. La peor tontería que cometí fue googlear los síntomas: “Cáncer, cáncer, cáncer”, decía por todos lados. Fui al médico y sí, efectivamente, tenía cáncer testicular. Tras una operación, el médico me dijo, “no te preocupes, 95% de los pacientes salen de esto después de la operación”. Al año siguiente tenía que hacerme una tomografía y listo, la vida por delante.” – Sebas Azcárate
Durante un año Sebas participó en competencias de Spartan y no le fue nada mal. Ahí tuvo su primer acercamiento a la montaña. Pero llegó el momento de hacerse la tomografía.
“A la semana llegaron los resultados. Los tomé y abrí desinteresadamente, como quien está seguro de que tendrá la respuesta que espera. Leí: “Positivo para actividad tumoral maligna en retoperitoneo de apróx. 15cm”. Ahí estaba, otra vez, un tumor pegado a la arteria aorta. Segundo round, pensé. Me operaron y después de pasar unos meses en el hospital, me negué a recibir quimioterapias. Estaba convencido de darle a mi cuerpo y mi alma un proceso de curación de trabajo interno.” – Sebas Azcárate
Sebas tomó todo tipo de terapias alternativas, realizó cambios serios en su alimentación. Como afirma él, “fui bien adentro de mi para sanarme y recuperarme”. Después de cuatro meses, le dieron cuatro ciclos de quimioterapia. Se mudó a Ciudad de México, donde comenzó sus estudios en Fisioterapia y fue contratado por una empresa que organiza eventos deportivos. Entre ellos, realizó el montaje del UTMX.
“Sabía que había carreras de montaña, pero cuando trabajé en el UTMX con el montaje realmente me convencí de que tenía que probar esas carreras. Fue precisamente ahí donde me compré mis primeros tennis para trail y empecé a correr. Vivía en Tlalnepantla y a partir de ese momento estudiaba, corría y trabajaba.” – Sebas Azcárate
La primera carrera de Sebas fue el SkyMarathon Iztaccíhuatl del Triple Corona, en la que quedó en 5º lugar de los 15K. Pero vivir en Tlalnepantla no le hacía feliz. Pronto dejó la universidad.
“Hace un año el Che me contrató para realizar los preregistros del UTMX. Comencé a trabajar y entrenar con él. El Che ha sido mi mentor. Me di cuenta que lo que estaba mal no eran los estudios, sino vivir en la ciudad, rodeado de concreto. Entonces me moví a Pachuca, para continuar mis estudios en la Universidad de Futbol, pero sobre todo para vivir al lado de la montaña.” – Sebastián Azcárate
Sebastián realizó los 37K del UTMX y quedó en 9º lugar, Desafío en las Nubes donde también quedó en 9º lugar, corrió la Boca de Tiburón en el Iztaccíhuatl quedando en 3º con Isabel Bolivar, asimismo en el Urban Trail de Guanajuato llegó en 1º de su categoría y 4º general. Todo esto en un año.
“He ido mejorando poco a poco, pero definitivamente este ha sido uno de los mejores años de mi vida. Trabajo, estudio y entreno. Literal, abro la puerta de mi casa y ya estoy en el trail.” – Sebastián Azcárate
Actualmente Sebastián combina el entrenamiento, trabajo y estudios con la planeación de un proyecto documental que saldrá a finales de este año y en el que, además de conocerle más de cerca, podrás vivir una aventura inédita en el país. Es sorpresa, pero por lo pronto nos adelanta que llevará sus más grandes experiencias de la montaña a la orilla del mar.
“Desde el primer momento en que toqué un balón de americano me fue muy bien. En la montaña, en cambio, es un esfuerzo constante, estoy fuera de mi zona atlética. Eso sí, viniendo de Cancún, la tierra más llana, la primera vez que vi el Izta y el Popo, me sentí en otro planeta. Fue una atracción extraña pero profunda.” – Sebastián Azcárate
A sus 25 años de edad, Sebastián ha ido cumpliendo cada una de sus metas deportivas, pero sobre todo, la vida le ha puesto en el camino grandes desafíos personales que le han llevado a ser, día con día, una mejor persona, entregado en cuerpo y alma a la montaña, el lugar donde encontró un espacio para su sanación.