Aunque la historia de mexicanos en los ochomiles es amplia, esta es la primera ocasión en que una compañía mexicana, con guías mexicanos y clientes mexicanos, logra cumbre en una montaña de más de ocho mil metros de altitud. La expedición, sin embargo, necesariamente se realizó en alianza con una empresa autorizada localmente para ofrecer estos servicios.
Eduardo Saenz Jr. es el primer mexicano en encumbrar el Manaslu en esas condiciones, bajo los servicios de Ponce de León Expediciones.
La cumbre se consiguió el martes 25 de septiembre a las 4:58am (hora de Katmandú), después de una jornada continua de 20 horas en las que ascendieron de campo 3 a cumbre, y de regreso a campo base.
Platicamos con María José Harispuru, coordinadora de comunicación de Ponce de León Expediciones, sobre el proyecto, y nos comentó que ahora mismo Eduardo Saenz Jr., de 24 años de edad, ya se encuentra de vuelta en el campamento dos, donde le esperaron el guía mexicano Daniel “Tanque” Araiza, y su padre, quien también intentará cumbre en caso de que se presente una nueva ventana de buen tiempo.
Eduardo alcanzó la cumbre del Manaslu acompañado de Charlie, sherpa de la expedición, utilizando oxígeno suplementario a partir de los 7,000 metros de altitud, y bajo el monitoreo vía satélite de Héctor Ponce de León desde el campamento tres. Gracias a la buena ventana de tiempo que tuvo, hizo el recorrido directo del campamento tres hasta la cumbre y de ahí volvió al campamento campemento base. Para ello, tuvo que realizar el ascenso y descenso prácticamente en un día y sin parar.
Ante el éxito de la expedición, Héctor Ponce de León se encontrará con Daniel Araiza en el campamento base para coordinar su intento de cumbre sin uso de oxígeno suplementario en los próximos días.
De lograr el ascenso, Héctor Ponce de León conseguirá su séptima cumbre a una montaña de más de ocho mil metros, después de haber llegado a la cima de diferentes montañas como el Everest, Broad Peak, Cho Oyu, Gasherbrum, Shisha Pangma y Gasherbrum. Por su parte, el Manaslu sería la primer cumbre de más de ocho mil metros para Daniel Araiza.
La expedición al Himalaya surgió de la coincidencia de objetivos de ambos guías y ambos clientes. Por un lado, Héctor lleva alrededor de diez años sin hacer un ocho mil, mientras que Daniel -su compañero de cordada en el proyecto Ice Calling-, buscaría su primero. Por su parte, Eduardo y su padre, ante su proyecto de vida de tener una experiencia en el Himalaya y expediciones satisfactorias con Héctor, decidieron emprender el proyecto.
Comentarios no permitidos.