Lo que antes había sido un paseo o un entrenamiento, se convirtió en una contrarreloj
En los últimos años, los nombres de Karina y Santiago Carsolio no han hecho más que retumbar en el mundo del Trail Running, ya que desde su llegada han logrado colocarse como jóvenes talento, prácticamente siempre candidatos a pódium y han llegado a convertirse en referencia no solo a nivel nacional, sino también internacionalmente.
Pero para ellos no todo son las carreras, de igual manera (o quizá más) disfrutan de la simple libertad que les da su pasión al correr por las montañas, en ocasiones acompañados y otras veces completamente solos.
Así fue el caso de su primera circunvalación contra reloj al Nevado de Toluca, realizada por Santiago hace unos días. Como él mismo la describe, es una ruta muy variada y exigente de skyrunning puro, con poco más de 9 kilómetros. “Santi” nos cuenta como le fue en éste, su primer intento.
Circunvalación al Nevado de Toluca contrarreloj
Por Santiago Carsolio
Han pasado dos semanas, pero cada que pienso en la ruta me trae buenos recuerdos. La circunvalación del Nevado de Toluca es una ruta de skyrunning puro, no solo por la altura si no porque es técnica en la mayor parte del recorrido.
Cuenta con arena, bloques de piedra suelta, nieve, hielo e incluso un poco de escalada (nunca más difícil que 4tas clases, salvo una o dos). La ruta comienza en el estacionamiento más alto y sigue toda la arista del cráter, es decir, conecta todas las cumbres que rodean las lagunas, para finalizar en el mismo punto del estacionamiento. Son poco más de 9km.
Es un proyecto que llevaba tiempo queriendo hacer y no sé por qué no me había animado. Antes lo había hecho de paseo, caminando o como parte de mi entrenamiento, pero fue entonces cuando me pregunte en cuánto tiempo lo podría hacer.
Calculando los tiempos que requieren los tramos de escalada y desescalada en solitario y las tediosas arenas, pronostiqué que bajar de las dos horas sería un muy buen tiempo, en tanto que las dos horas aun sería un tiempo muy razonable. Fue entonces que una mañana, sin haber aclimatado me animé a ir.
Empecé a las 9:30 en un día totalmente despejado. Solo habían unas secciones por el Pico del Águila que estaban nevadas y con hielo, pero todo lo demás estaba en condiciones óptimas para hacer un buen tiempo.
Llegué a la cumbre principal en poco menos de 60 minutos y solo paré para tomar un par de fotos. De la cumbre al paso del Pico del Fraile, vienen unas desescaladas en las que se debe tener cuidado si se quiere conectar el mayor número de cumbres posibles y ahí perdí alrededor de 15 minutos, en un diedro que luego se convierte en chimenea.
Pasando eso, viene una bajada en terreno favorable y después el último ascenso a la cumbre que está arriba del paso a las lagunas. Una vez alcanzada dicha cumbre se baja por el sendero más conocido para regresar al estacionamiento. Paré el reloj en 1:55, satisfecho del tiempo realizado en mi primer intento contrarreloj.
Espero regresar pronto a la ruta y ojalá más gente se anime a realizar este reto, que no solo es hermoso, sino también exigente.